Partimos de una puerta abandonadisima a la que le faltaba la mitad. Cuando mi cuñada se mudó y fuimos a ayudarla con la limpieza del lugar, era una casa antigua bastante descuidada y por ahí andaba tirada ella. Es de esas puertas de madera de las casas chorizo de doble hoja que dan a las galerías.
La idea era transformar esa media puerta en un objeto decorativo y que ademas tenga una función nueva y diferente.
Así está cerrado, cumple la función de perchero o de recibidor, con un pequeño estante.
Pero cuando lo abrimos todo lo que debería ser las ventanas de la puerta las convertimos en espejo.
Es genial para la entrada de casa. Llegamos de la calle y nos recibe para que dejemos todo, abrigo, llaves, zapatos, billetera (para los hombres), paraguas (si es un día lluvioso como hoy)...
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Gracias por pasar :)
¡Guau, vaya trabajo! Desde luego que podeis estar orgullosos, porque no le falta detalle. Nunca había visto nada parecido y ¡es precioso!
ResponderEliminarFelicidades.
Besos
Con cualquier puerta con vidrio se puede hacer lo mismo si te animas!
ResponderEliminarUn beso grande!